martes, 11 de septiembre de 2012

niebla


{...}


Y quizá debería cerrar los ojos y sumergirme en el océano de realidad para dejar de imaginar deseos de alas imposibles. Porque no habrá ocasión para volar esta vez. El fuego no se extingue, para algo soy Phoenix, pero ahora también me abrasa a mí. Todo se hace ascuas a mi alrededor y creo que lo único que resta, lo único que se ha echado un salvavidas al cuello es el corazón. Y es una pena pues corrobora una tristeza adherida a mi piel y a lo más profundo de mi ser. Es de piedra.No existen los sentimientos ni las sensaciones. Todo es fictio o demasiado suave. No lo noto. Todo se vuelve gris, desvaído. Todo se apaga.

Buenas noches.

No hay comentarios:

Publicar un comentario